De nuevo los pandilleros hicieron de las suyas en la calle Murillo, a altura del centro comercial Metrocentro, luego que se lanzaran piedras durante el aguacero de este viernes.

Los desadaptados lanzaron objetos contundentes hasta tal punto que buses de Transmetro y vehículos particulares tuvieron que detener la marcha evitando que algún vidrio o pasajero resultara afectado. 

El comercio de la zona tuvo que cerrar para evitar saqueos en medio del caos. 

Los comerciantes y residentes de la zona aseguraron que es reiterativo estos enfrentamientos cada vez que llueve en esta importante arteria vial de la ciudad sin que hasta el momento no haya una solución definitiva, por lo que piden a la Alcadía Distrital y la Policía Metropolitana de Barranquilla implementar operativos durante las lluvias.